La Norte del Puro es una vía que hay que hacer algún día.
No es una pasada de difícil pero hay que saber. Parece que está reequipada pero aún así no creo que triunfe el efecto Brummel.
De la cámara de Inazio sale esta más que aceptable peliculilla.
viernes, junio 8
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3 comentarios:
Cal felicitar a l'Inazio per la filmació, sé el difícil que és que et facin cas els companys quan intentes filmar alguna cosa, bona feina sí senyor...per cert he vist que no fan servir la tècnica de doble corda tot i anar-hi, m'ha semblat veure que passàven les dues cordes per les assegurances, i això que aquestes no éren precisament parabolts! també la utilització d'una cinta exprés per unir-se a la reunió...suposo que també es lligaria amb la corda a la reunió, sense afany de polèmica ni crítica, però tenia entès que per minimitzar la força de xoc en cas de caiguda quan anem amb doble corda, no bessones, el millor és passar alternativament o segons et demani la via, una sola corda per l'assegurança.
la Norte del puro,es una de las vias bonitas que existen en los Riglos, su dificultad es hoy en dia moderada,
más teniendo en cuenta un poco su parte de exposición, (ocurre un poquito como en el fire), esta digamos semi equipada, y es para el que la consigue un bonito logro, su bajada tambien tiene su encanto y en su conjunto es del todo más que aceptable, eso si poco recomendable para todo aquel que no tenga cierto nivel, y no se haya paseado mucho por los maravillosos Riglos, Toño and Cia. son bien conocedores de ella pues los tres la han recorrido en cuantiosas ocasiones, es una suerte que al David le den miedo los Riglos, y no se acerque mucho por estos parajes, de todas maneras
Sres. como Alusin o Fernando ya quedan pocos, y ellos si han sabido
plasmar en sus lineas verticales la verdadera esencia Riglera, EL PLACER DEL GESTO en su forma más simple y sencilla aliando exposición, humildad y entendimiento.Rokiski
Jaume,
Ciertamente es difícil. Lo sé por haber estado a los dos lados de la cámara.
En cuanto al doble cuerda, sí tienes razón. Pero en mi interior hay un voz que me dice que no hay para tanto y que tenemos el coco comido con tanta teoría de la desgracia.
Rokiski, como siempre acertando con la solución.
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