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Nadie debe trastornarse. Ellos discurren por nosotros.
Este tío del video está enseñando a sus nietos, situados a pie de vía, cómo hay que hacerlo para tirarse desde la punta de la cueva, que es una cosa que requiere su concentración. Y... dado que la magnitud del salto es desmedida se considera un éxito que solo se de un coscorrón.
Este es el quid del asunto: transmutar una caída escalando –que en principio es una frustración- en un triunfo. Triunfo porque lo que importa no es haber pinchado en la vía, si no haber salido indemne de un vuelo de 30 mts.
Este es uno de los estribos de la nueva doctrina CE para la UIAA. Se creará una subsesecretaría con una comisión de técnicos (Stoneflymasters) de ámbito comunitario, obligatoria en los veinticinco estados miembros, para control de los desmadres que ocasione la aplicación de la ley.
La Fedme y las autonómicas reinstaurarán en sus cursillos de escalada y barranquismo las prácticas de salto de primero: el primer día 20mts y el segundo 40. Éstos métodos se abolieron en los años cincuenta del siglo pasado por azarosos –de vez en cuando se rompían las cuerdas- pero en la actualidad es posible ejecutarlos sin percances (Pin Stchwbeer dixit).
Será de aplicación obligatoria en todos los cursillos desde enero de 2008. También tendrá carácter retroactivo para todos los cursillos impartidos desde el 2000. Los antiguos cursillistas podrán pasar con una sola sesión de 25 mts., serán “llamados a filas” mediante una citación federativa. Está tipificado como falta grave el no presentarse a tiempo y se paga con penas de trabajo comunitario (recogiendo colillas en la Fuixarda).
Como siempre, hay un colectivo de descontentos con la nueva ley, se han agrupado en la opositora Negativa Vertical/Noatodoy.no y están cavilando que hostias hay que hacer o decir.
En toda oportunidad en que se cambia un uso establecido parece como que el globo se va a pinchar, salen protestones de debajo los bloques y opositores sistemáticos.
La experiencia demuestra que en unos pocos años la “nueva costumbre” será de uso común y aceptada sin reticencias por los escaladores. Todo lo de antes quedará para los audiovisuales, como siempre.