lunes, septiembre 22

MENÚ PARA HOY: BUENO, COMO SIEMPRE.

Area de descanso para curritos. Una crónica del Guardiánentrelospinchos

Hace un mes tuve ocasión de gozar de un par de jornadas de mala meteorología en el Ventosa i Calvell.
Todos sabemos lo que hay. Emerges al exterior por la mañana a enroscar el primero del día, observas las excremencias del tiempo –pasadas y futuras-, a una cota más alta ha caído algo de nieve por la noche, el cielo continúa marrón y tiene pinta de seguir así. Hace una cierta rasca y un vientecillo cabrón. Te sientes segregado por el hecho de ser fumador, así no da gusto fumar nada. Lamentas cierta indefensión ante las normas, a mi también me molesta el humo del tabaco. Bonito día de mierda.
Asumiendo el panorama del día, como no tenía prisa ni compromiso para pirarme de allí, además para ello necesitaba un ratito de buen tiempo que no acababa de llegar, decidí pasar el tiempo sumido en la irreflexión.
Al cabo de un rato de misticismo… solo quedaba meter la nariz en el meollo de la casa: los fogones, a ver qué se cocía.
Así, valiéndome de la cierta inmunidad que me daba mi status de invitado, busqué ese lugar diferente de la sala principal o la puta calle.
En la cocina el horario es continuo, de unas 17h., con un grupo de seis personas todo funciona, hay un ambiente muy suelto, una casi obsesión por la limpieza y el orden; ambas cosas me gustan.
El recinto –muy apañao- debe tener unos cuarenta metros cuadrados bien aprovechados. Las paredes evocan vagamente la disposición interior de un yate o una autocaravana, todo el espacio bien aprovechado, a veces para más de un uso.
Sirven desayunos y cenas, en ocasiones bebidas y algún bocata. A los desayunos del pelotón nunca asistí, esos días a esas horas sobaba, pero sí como espectador a los preparativos de varias cenas.
El menú de esa noche era:
Sopa de pasta (no se acaba, siempre hay más)/ Ensalada / Merluza empanada y escalibada / Flan o Compota de manzana *Pan, agua y vino a gogo*
La sopa de pasta: rica de la hostia. Siempre quema que te cagas pero acabas moqueando de felicidad.
Después la ensalada, pieza básica de sustento. Debo decir que lo que más me impresionó es la magnitud de las ensaladas. Sus ingredientes (muchos y variados) y su preparación ocuparon a dos/tres personas durante más de dos horas, sin casi columpiarse.
La merluza: todos decían que estaba muy buena. Menda no la probó en cumplimiento de una tara infantil que no le permite comer pez con espinas muerto por pesca. La escalibada excelente, un poco fría para mi gusto: le quita sabor.
Qué decir del postre, pues que dada mi circunstancia tomé de los dos. Me quedé con la compota como ganadora, aunque me metí tres flanes antes de decidirlo.
De esta manera alimentan a unos 40/50 comensales por noche. La mayoría chamuscados de hambre a base de darle fuego al carro todo el día, escaladores pocos o cero. El trato al público es amable pero firme. Para después de la cena existe un surtido de viejas revistas bien conservadas para entretenerse en plan hemeroteca, aunque la mayoría prefiere salir 10 minutos a la calle para echar humo, ni que caigan chuzos de punta, arrinconando positivamente de esta manera a los no fumadores y a los niños. Aún unas partidas al parchís, la enésima lectura del mapa o la reseña que no reportará nada que no hayamos podido pillar antes.
Al final de la velada –y ulteriormente a la desocupación de la vesícula- ya en el dormitorio, obligada promiscuidad y despliegue de aires de sentina. Cada semana hay una o dos noches sorpresa con tablao de ronquío improvisado o carreras por padecimientos espontáneos.
Una vez todos los clientes en el redil, los de la casa también se van al sobre hasta las 6h a.m.
Agotados mis recursos para matar el tiempo, yo también desfilo.



8 comentarios:

Marieta dijo...

ahí va, qué gracioso: el hule ese de limones, fresas, cerezas y limas lo tenemos en la cocina de casa,¡igualito!
El refu donde he comido mejor que en ningún otro fue en el hotel fluh, en el valais(claro...que también se lo cobran, será por eso que se llama hotel -digo yo-)

Raúl dijo...

Relajada lectura, después de tantas batallas.

A mí también me ha llamado la atención la ensalada a juego con el hule, pero yo para casa lo prefiero de cuadros, así no hay dudas de donde pinchar.

Anónimo dijo...

hahah!

Donn..quants "SOPARS" hauré engolit procedenbts d'aquesta cuina.yate-caravana.

MOlt bo la dscripció del tRACTE ( amable-pero firme)...molt lograt i descriptiu...potser condescendent, potser excessivament precis...heheheh.

Suposoq ue cal viure un mes currant aqui dalt per entendre moltes coses.

UN parell d'estius va haver-hiun cuiner BASC que el tio s'ho currava de la òstia ( ni fluh ni res MARIETA), truites d eriou, Galtes de POrc i mil exquisideses que flipavesssss!

El Cuscus del Boss tampoc té res a envejar als de Casablanca..potser li falta picant...

S'ho curren de Puta mare, en la meva modesta opinió.

JOer Donn, una mica més i ens veiem..jo volia pujar demà...el que passa es que la meteomurphy ja m'ha tocat els collons i em quedo voltant per la plana ilerdenseosonencoyloquepille...mentre no plogui o hi hagi coves...cotxe, papeio, corda i a escapar del nubarró...

Donn Demetrinco dijo...

Marieta,
A los refugios se llega caminando. Allí donde llegas en carro sería -por la parte baja- un albergue de carretera.
Lo del hule sabía que traería comentarios, es como para hacerlos.

Hola Raul,
No es de despreciar una buena mantelería blanca, así se ve mejor el objetivo cuando salta fuera del plato.

TRas,
El día en cuestión nos atizamos pa comer una mariscada. Llegó desde el caprabo de Viella en el gran abejorro.
Vamos que se come mejor que en muchos lugares del valle.
au ponte el gtx y pónselo a la familia, que hoy caen chuzos de punta en mi barrio.

cheers

Marieta dijo...

eh...mmm...Caminando se llega, sí señor. Creo que tardé unas 3 horas en llegar al dichoso "hotel" (2.600m) y ahora, no vale como refugio??? joer! que estricto.
(quizás había carretera -o autopista- y yo no la ví, casundena)

Donn Demetrinco dijo...

Buff, buff,
He metido la gamba, deberás disculpar mi desliz producido por carencia de la adecuada info.
Tres horas andando es mucho más lejos que el último albergue de carretera, claro que debe saber rico el papeo.
bon profit.

Anónimo dijo...

Con tu comentario me han venido a mi mente viejos recuerdos de mi vida anterior (ya pasada...)

Hace bastantes años subí al Ventosa para unos días de escalada con Q.F. y a parte de escalar que era lo que nos movía, acabamos entre fogones y ollas gigantescas currando. Sé presento un numeroso grupo, no esperado al refú, y como Q.F. tenía cierta amistad con el guarda, pues eso a currar.

La verdad es que me gusto como experiencia, una buena manera de no pasar hambre...

Saludos
Samarkanda

Donn Demetrinco dijo...

Hola Sam,
Creo que alguna vez en la vida hay que hacer un stage en la cocina de un refu. Más que nada para ver el trato con el público como es. La gran asignatura pendiente...